Construyamos compromisos no solo lealtades.
Miguel A. Terán
La lealtad debe ser parte del compromiso, porque
el compromiso genera lealtad, pero no es común que ocurra al revés. Es fácil
engañarse con muchas falsas lealtades, pero la verdad –como refirió un autor
anónimo- es que muchos son leales a sus necesidades o a lo que tú tienes o
representas, por lo cual cuando cambian sus necesidades o cambia lo que tú eres
o representas, desaparecerán sus lealtades.
Paradójicamente, las lealtades más consecuentes y
unidas al compromiso las vemos en algunos animales hacia sus amos.
Desgraciadamente, las lealtades humanas son más condicionales y para
muchos la oportunidad controla su lealtad.
Un viejo refrán popular dice “El amor y el interés
se fueron al campo un día y más pudo el interés que el amor que me
tenía”, he aquí una clara muestra de deslealtad. Sin darnos cuenta
intentamos comprar lealtades, pero no siempre logramos compromisos. El escritor
estadounidense Jeffrey Gitomer planteaba que “No te ganas la lealtad en un día,
porque en realidad la lealtad te la ganas día a día”. Mientras que el político
estadounidense Abraham Lincoln reconocía que “El compromiso es lo que convierte
una promesa en realidad”.
Expresaba el filósofo, escritor y activista
político francés Jean-Paul Sartre que “El compromiso es un acto, no una
palabra”, y podríamos considerar que el compromiso se expresa en actos, no en
palabras.
La idea no es simplemente participar en un
proyecto, es comprometernos con el logro de ese proyecto. “Cuando estás rodeado
de personas que comparten un compromiso apasionado en torno a un propósito
común, todo es posible” afirma Howard Schultz, el hombre de negocios
estadounidense.
La tenista checoslovaca Martina Navratilova,
realiza una válida comparación al decir: “La diferencia entre la participación
y el compromiso es como el jamón y los huevos. El pollo está involucrado; el
cerdo está comprometido”.
Una interesante frase del escritor, político y
diplomático italiano Carlo Dossi plantea que: “El falso amigo es como la sombra
que nos sigue mientras dura el sol”, ratificando la dificultad para alcanzar la
lealtad permanente. Por su parte, una frase del autor Habeeb Akande, refiere
que “La lealtad de una esposa se prueba cuando su marido no tiene nada. La
lealtad de un marido se prueba cuando lo tiene todo”. “Lealtad al país siempre. Lealtad al gobierno
cuando se lo merece”, fueron palabras del escritor estadounidense Mark Twain.
Entonces, procuremos no confundir lealtad con
compromiso y esforcémonos por lograr más compromisos que lealtades.
18 de Enero de 2016.
Miguel A. Terán
Psicología, filosofía y coaching.
Twitter: @MiguelATeranO
Nota: imagen extraída de la
web
Referencias: Tomadas de
Wikipedia + RAE (Diccionario de la Real Academia de la Lengua)
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