“La vida es un
juego del que nadie puede en un momento retirarse llevándose sus ganancias”.
André
Maurois (1885-1967)
Novelista y ensayista francés.
Audio / Vídeo en: http://youtu.be/QvOCE3zdcBQ
REFLEXIÓN: En
el transcurso de nuestra vida nos dedicamos a construir una complicada red de
relaciones, contactos, costumbres, hábitos, deseos, estilos de vida, apegos,
creencias, paradigmas y mucho más, que con el paso de los años se convierten en
cadenas y candados, que impiden conservar nuestra original sensibilidad,
flexibilidad y creatividad, haciendo –literalmente- imposible retirarnos del
juego por voluntad propia. La razón para no poderlo hacerlo es que
requerimos tiempo, esfuerzo, constancia y, muchas veces, grandes sacrificios
para desatornillar lo que hemos atornillado por años.
Hemos apretado tan fuerte tornillos y tuercas que nos
faltarán fuerza y tiempo para lograr soltarlos. Entonces, la vida se nos ha ido
apretándolos y para aquellos pocos que lleguen a entender el juego, si lo
entienden y reaccionan tarde, ya no tendrán tiempo de aflojarlos. En
otras palabras, podemos considerar que ningún prisionero decide cuando salir de
su cárcel.
Es más fácil montarse en la rueda de la vida que bajarse
en el momento que lo deseamos. Entre más velocidad le demos a esta rueda, más
difícil será detenerla. Lo recomendable, parece ser detenerse poco a poco,
hasta que podamos parar y bajarnos. Quizá y aún mejor será no dejar que tome
mucha velocidad, porque no sabemos si la podremos detener a tiempo. Es una
realidad que nunca nos llevaremos las ganancias, pero al no permitir que éstas
nos esclavicen, podremos –cuando menos- tener tiempo para disfrutarlas en
vida.
El Papa Francisco, en su directo y categórico
estilo, dijo "Nunca he visto un camión de mudanza detrás de un
cortejo fúnebre, nunca". Alguien refería que tampoco ha visto una lápida
del cementerio con un balance personal o bancario.
Muchos de nuestros vacíos internos tratamos de llenarlos
por fuera, y allí nos complicamos, nos hacemos parte de un show, nos ponemos
una careta o antifaz, que luego se nos hace difícil quitarla y no queda
otra que seguir actuando, porque “el show debe continuar”. El escritor y
teólogo francés François Fénelon consideraba que el
verdadero medio de ganar mucho consiste en no querer nunca ganar demasiado.
Entre más ligeros estemos con mayor facilidad
transitaremos y disfrutaremos de nuestra vida, pudiendo retirarnos del juego
más rápido, con menos traumas y a tiempo.
No se trata de vivir una vida de conformismo, se trata de
alcanzar una vida plena y de satisfacción, dentro de razonables límites y
prioridades, que armonicen y equilibren lo físico, mental, emocional,
espiritual y social.
¡Feliz Día!
Miguel A. Terán
Twitter: @MiguelATeranO
Nota: Foto ilustrativa extraída de la Web.
No es mala idea, hacer un alto en el camino y revisar nuestros "Paradigmas", para evaluar a dónde y cómo nos han traído a este lugar.
ResponderEliminarEsta iniciativa diaria de Miguel de compartir unos pensamientos selectos con sus respectivas reflexiones son unos minutos de oro para nuestro ser. Adicionalmente son una excelente oportunidad para compartirlos con la familia y amigos. Muchas gracias
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