lunes, 17 de agosto de 2015

El riesgo de vivir en un mundo lleno de expertos. Miguel A. Terán

El riesgo de vivir en un mundo lleno de expertos.
Miguel A. Terán

Hoy día todo mundo es “experto”, bien porque se considera, cree que lo es o cuando menos opina como un “experto” acerca de casi cualquier tema. A pesar de que el conocimiento –hoy día- crece en forma exponencial, paradójicamente, continúan apareciendo expertos como "conejos salen del sombrero de un mago". 
La absurda velocidad de estos tiempos, también afecta la calidad y el desarrollo del conocimiento, en una sociedad donde todo se vende en “fáciles lecciones”, donde requisitos y prelaciones para formarse son palabras que parecen estar de salida del diccionario. Expresaba el filósofo romano Tito Lucrecio Caro, algunos años antes de la era cristiana, que  “Si las cosas pudieran provenir de la nada, el tiempo no sería esencial para su crecimiento, para su maduración hasta la plena madurez. Los bebés serían jóvenes en un abrir y cerrar de ojos, y los bosques completos brotarían de la tierra. ¡Ridículo! Sabemos que todas las cosas crecen poco a poco, tal como debe ser, a partir de su naturaleza esencial”.   
“Solo sé que no sé nada”, afirmaba el filósofo griego Sócrates. Con toda seguridad, podemos afirmar, que viniendo esa expresión del genio de Sócrates, no es posible considerar que la referencia era a su escaso conocimiento; por lo contrario, su misma sabiduría le permitía reconocer su ignorancia, teniendo conciencia que su amplio conocimiento era poco en comparación con todo lo que desconocía. “Lo que sabemos es una gota de agua; lo que ignoramos es el océano”, expresaba en similar línea de pensamiento el matemático y físico inglés Isaac Newton. 
En el trabajo de investigación de los profesores Dunning y Kruger de la Universidad de Cornell, ellos encontraron que los individuos de escasa habilidad o conocimiento sufrían un sentimiento de superioridad ilusorio, que les llevaba a distorsionar o formar un juicio inexacto de la realidad, hasta considerarse absolutamente preparados y hábiles, sin reconocer su desconocimiento o ineptitud.   
En palabras del naturalista inglés Charles Darwin “La ignorancia frecuentemente proporciona más confianza que el conocimiento”. Los mencionados investigadores concluyeron que  “Los individuos incompetentes tienden a sobrestimar su propia habilidad, son incapaces de reconocer la habilidad de otros e incapaces de reconocer su extrema insuficiencia”. 
El mismo profesor Dunning considera que esos resultados deben motivar el desarrollo en los individuos de un pensamiento autocrítico, disminuyendo o evitando la probabilidad de impresiones erróneas acerca de nuestros propios conocimientos y habilidades. Quedan estos resultados disponibles para la evaluación y análisis de los lectores. Lo cierto es que se requiere cada vez mayor preparación y actualización, para considerar que dominamos alguna materia con razonable propiedad, debido al crecimiento y desarrollo del conocimiento. 
Decía el filósofo griego Aristóteles “El ignorante afirma, el sabio duda y reflexiona”. Por su parte, el filósofo y matemático francés René Descartes, planteaba “Daría todo lo que sé, por la mitad de lo que ignoro”. Un verdadero profesional nunca termina su preparación, siempre estará formándose y desarrollándose. 
Retomar la profundidad en la adquisición de conocimientos y dedicar el tiempo necesario para adquirir, reflexionar y madurar las experiencias, es condición vital para comprender la evolución de los procesos humanos y sociales de todo tipo, y poder actuar efectivamente sobre ellos. Una asistencia profesional, en cualquiera de las diferentes áreas del conocimiento humano,  no puede ser una receta de cocina, porque  las recetas de cocina son solo para preparar comidas. 
Como recomendaba el científico Albert Einstein, evitemos “Saber cada día más y entender cada día menos”, pero sobre todo cuidemos de no caer en manos de muchos expertos que no son tales. Debemos prepararnos e informarnos para que nuestra ignorancia no se convierta en nuestro “Talón de Aquiles” o en nuestra debilidad, para vivir en un mundo de “expertos”.

Agosto 18, 2015.

Miguel A. Terán
Psicología, filosofía y coaching.

Twitter: @MiguelATeranO
Nota: imagen extraída de la web
Referencias: Tomadas de Wikipedia + RAE (Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española).


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