Mientras millones de toneladas de
alimentos son desperdiciados anualmente en unas partes del mundo; en otras
partes de mundo, millones de personas pasan hambre, sufren de desnutrición y
son muchas las que mueren por tal razón.
Algunos alimentos se pueden donar
y muchas empresas lo hacen. Recientemente una legislación francesa obliga a las empresas de alimentos a donarlos para
no botarlos.
En los hogares, significativa
cantidad de alimentos son desechados al deteriorarse en los refrigeradores y
despensas, debido a que se compra más cantidad del consumo real. Compramos por
impulso.
Grandes cantidades de alimentos
se desperdician en restaurantes, banquetes, hoteles, etcétera, cuando las
personas reciben o toman porciones superiores a sus necesidades y deseos. Este
tipo de alimento, por razones de higiene y salubridad, no son recuperables, ni
para reciclarlos o donarlos.
Debería existir una ley que exija
a los restaurantes ofrecer los alimentos a precio diferencial de acuerdo al
tamaño de las porciones, debidamente indicados en su menú. Habría ahorro de
dinero para el cliente y se evitaría el despilfarro de alimentos al consumirse solo
la necesaria porción.
El desecho de alimentos está relacionado principalmente
con la conciencia de consumidor. Consumidores más conscientes harían una
significativa diferencia.
Miguel A. Terán
www.miguelterancoach.blogspot.com
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