”Algunos están
dispuestos a cualquier cosa, menos a vivir aquí y ahora”.
John Lennon
(1940-1980) Cantante y compositor británico.

Lo único real
y seguro es el aquí y el ahora. Poco podemos hacer por el pasado, su único
aporte es el beneficio y la herencia de la experiencia, valiosa – por cierto –
siempre y cuando podamos reflexionarla y aprender de ella. El futuro de alguna
manera podemos esforzarnos por planificarlo, para hacerlo más predecible, pero
no podemos vivir enfocados en el mañana porque primero debemos enfrentar con
convicción y firmeza nuestro hoy.
No es lógico
permitir, por ninguna razón, que el pasado nos robe nuestro presente, ni
opaque nuestro futuro. Las dificultades y problemas existen en el momento
presente, no podemos encontrarles en el pasado, porque allí solo están sus
causas. Tampoco podemos buscarles en el futuro, porque aún no existen, no ha
llegado. Y con las circunstancias, problemas y vicisitudes de cada día parece
más que suficiente, para complicarnos buscando lo que ya pasó o lo que aún no
ocurre. Tengamos siempre presente las palabras de René Descartes, el
famoso filósofo, matemático y físico francés, quien dijo: “Mi vida estuvo llena
de desgracias, muchas de las cuales jamás sucedieron”, pero con seguridad se
sufrieron.
El presente
nos exige enfrentar lo que no quedó resuelto del pasado y que ahora nos afecta
o incomoda, pudiendo llegar a crecer y desarrollarse, por lo cual
responsablemente debemos resolverlo. La psicoterapeuta y escritora Virginia
Satir consideraba que Los problemas no son problemas, afrontarlos es el
problema. Ahora es el momento de iniciar nuestro camino hacia lo que deseamos
lograr.
Un proverbio
árabe plantea que “Lo pasado ha huido, lo que esperas está ausente, pero el
presente es tuyo”. Por su parte, el político y científico estadounidense
Benjamin Franklin afirmaba que “Un hoy vale dos mañanas” y quien sabe por
cuántos ayeres. Debemos, como recomendaba el escritor británico Charles
Dickens, reflexionar sobre nuestras bendiciones presentes, de las que todos
poseemos muchas; no sobre nuestras pasadas penas, de las que todos tenemos
algunas. Valoremos nuestro presente y aprendamos a vivirlo con la intensidad
que se merece.
Miguel A.
Terán
Twitter:
@MiguelATeranO
Nota: imagen
extraída de la web
Nota del autor
del Blog: Invito a todos mis amigos, seguidores y apreciados lectores a
compartir, con familiares, relacionados y contactos, esta reflexión y los demás
artículos publicados en este blog: http://miguelterancoach.blogspot.com. Tengamos presente que, en oportunidades,
unas sencillas palabras pueden hacer y ser la diferencia en nuestra vida o en
la vida de los demás.
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