“Pocos ven lo
que somos, pero todos ven lo que aparentamos”.
Nicolás Maquiavelo
(1469-1527). Diplomático, funcionario público, filósofo político y escritor
italiano.
REFLEXIÓN:
Otra traducción de este pensamiento de Maquiavelo nos dice que “Todos ven lo
que tú aparentas; pocos advierten lo que eres”. En realidad, el problema no es
tanto de quien engaña, sino de quien permite ser engañado. El sacerdote Jesuita
y psicoterapeuta Anthony De Mello, se preguntaba y respondía ¿En qué crees que
gasta su vida la mayoría de la gente? ¡En impresionar a los otros!
El polémico
político alemán Paul Joseph Goebbels, afirmaba que una mentira repetida
adecuadamente mil veces se convierte en una verdad. No es algo comprobado, pero
sí parece cierto que al rodearse algunas mentiras de otras mentiras y
ratificarlas en el tiempo, pueden llegar a parecer verdad. Una imagen personal
puede ser construida o destruida a base de mentiras.
El filósofo
griego Sócrates, por su parte, afirmaba que “La mentira nunca vive hasta llegar a vieja”. La
realidad parece ser que el tiempo ratifica o descubre las mentiras, pero cuál
es la fórmula para ratificarlas o descubrirlas, allí está el detalle, como dijo
Mario Moreno “Cantinflas”.
El historiador
romano Tito Livio decía que la verdad puede eclipsarse pero no extinguirse, o
sea que queda latente o escondida, en espera de ser descubierta la mentira que
la oculta. Somos engañados por la apariencia de la verdad, eran palabras del
poeta romano Horacio. El escritor francés François de La Rochefoucauld,
expresaba que el mundo recompensa antes las apariencias de mérito que al mérito
mismo. Mucha apariencia y superficialidad es mercadeada y comercializada en
estos tiempos, donde escasean verdaderos personajes y se siembran ídolos.
Retomando las
palabras del escritor e inventor japonés Kobo Abe, la realidad no necesariamente
coincide con las apariencias. Pero lo ideal es no dejarse engañar por las
apariencias. Hay mucha gente en el mundo, pero todavía hay más rostros, pues
cada uno tiene varios, nos decía el escritor austríaco Rainer María Rilke.
A pesar de que
la única verdad absoluta es que la verdad es relativa, tal cual lo expresó el
novelista francés André Maurois, debemos esforzarnos e informarnos para ver más
allá de las apariencias. Requerimos dejar a un lado nuestras creencias,
prejuicios y paradigmas, para tener mayor posibilidad de acercarnos a la
verdad.
Cuando somos
nosotros los que aparentamos, las palabras de François de La Rochefoucauld, nos
advierten que corremos el riesgo de acostumbrarnos a disfrazarnos para los
demás, y que al final nos disfrazamos para nosotros mismos, convirtiéndonos en
víctimas de nuestra propia mentira. En conclusión, para vivir sin preocupación
y en paz, dediquémonos a ser en vez de parecer.
Miguel A.
Terán
Twitter:
@MiguelATeranO
Nota: Foto
ilustrativa extraída de la Web.
Nota del autor
del Blog: Vivir en un mundo mejor solo podemos lograrlo compartiendo –con los
demás- nuestra riqueza, sea esta material, cultural o espiritual. En el caso de
compartir lecturas, nunca sabemos cuándo unas sencillas palabras pueden
hacer y ser la diferencia en la vida de alguien, al motivar cambios que le
lleven a un nuevo destino. Por ello, la invitación es a compartir esta
reflexión en: www.miguelterancoach.blogspot.com
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