El Pensamiento del Día (Jueves 10 de Octubre de 2013)
“El dinero hace soberbios, y la soberbia, necios”.
Refrán
REFLEXIÓN: Nos envanecemos o emborrachamos con el dinero, al igual que con el éxito o la fama, casi sin darnos cuenta. Todos quienes nos rodean, poco a poco, irán notándolo, menos nosotros. Seguimos pensando que somos sencillos, accesibles y hasta humildes, pero en realidad ya somos engreídos y soberbios; y como la soberbia lleva a la necedad, ya estamos listos para dar nuestros primeros pasos como necios.
Una vez lleguemos a esta etapa, nos gusta solo escuchar a quien dice lo que queremos oír. Nos vamos rodeando de individuos que solo dirán “si” a todos nuestros planteamientos, y a estos individuos los consideramos fieles y comprometidos. Convertido en terco y porfiado, el soberbio necesita más público, porque está convencido que la razón y la verdad le acompañan. Además, necesita halagos porque el elogio le hace feliz. Pero es una falsa felicidad porque depende de otros.
Refería el filósofo alemán Immanuel Kant que el individuo sabio puede cambiar de opinión, pero el necio, nunca. La soberbia es una demostración de fragilidad y miedo que se ocultan bajo esa máscara. Estará siempre a la defensiva ante cualquier crítica, independientemente que ésta sea constructiva. La soberbia es uno de los siete pecados capitales.
Lograr éxito económico – por supuesto de manera honesta - debe llenarnos de orgullo, pero nunca de soberbia ni prepotencia, porque de lo contrario el éxito real e integral, que nos permite llegar a ser felices con nuestros logros, siempre nos será esquivo.
Miguel A. Terán
¡Feliz Día!
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