El Pensamiento del Día (Lunes 15 de Julio de 2013):
“Razonar y convencer, ¡qué difícil, largo y trabajoso!
¿Sugestionar? ¡Qué fácil, rápido y barato!”.
Santiago Ramón y Cajal (1852-1934) Médico español.
Premio Nobel de Medicina 1906.
REFLEXIÓN: Cuando razonamos somos capaces de identificar
los diferentes aspectos o elementos involucrados en el tema que estamos
tratando, cuestionándolos y encontrando en éstos similaridades y diferencias,
que nos permiten tomar decisiones equilibradas. Por el contrario, cuando
somos sugestionados recibimos información dirigida a guiar o manipular nuestros
pensamientos, sentimientos, decisiones y comportamientos.
Tratar de convencer a través de argumentos y razones,
no siempre es rápido ni sencillo; muchas personas son más fácilmente
convencidas por la emoción. Es por ello, que el camino de la manipulación
es más utilizado que el camino de la razón.
La emoción altera, desvirtúa y domina la atención y
voluntad de la personas, impulsando y guiando sus acciones y conductas.
Entonces, la sugestión al utilizar las emociones, puede dominar voluntades,
llevándolas a decidir y actuar en determinada dirección o sentido.
Muchos procesos sociales y políticos, negociaciones y
ventas dependen de la utilización de las emociones, en vez de las
razones, por alguna de las partes involucradas. Entender y diferenciar entre
emociones y razones es la única alternativa para no ser llevados a actuar
en determinado sentido, alejado de lo lógico y razonable.
Debemos acostumbrarnos a dar y exigir argumentos y
razones a nuestras decisiones y acciones, evitando ser convencidos y
guiados por las emociones. Entonces, dejemos las emociones para el amor,
aunque hasta en el amor un poquito de razón es necesaria para proteger nuestros
corazones.
Miguel A. Terán
¡Feliz Día y Feliz Semana!
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