El Pensamiento del Día (Martes 12 de Noviembre de 2013)
“Equivocarse es un defecto de todos, pedir disculpas es una virtud de pocos”.
Autor Anónimo.
REFLEXIÓN: Errar o equivocarnos es de humanos. Sin embargo, esta “humana” característica no debería justificar los mismos errores o equivocaciones continua y permanentemente. Lo que sí es importante, es que cuando nuestros errores o equivocaciones afecten a otros, pidamos disculpas e incluso hagamos esfuerzos por enmendar los daños ocasionados.
Pero la realidad es que a algunos individuos les es difícil ofrecer disculpas. Pareciera que excusarse es reconocer que son humanos y hasta rebajarse o bajar de su pedestal.
Lo cierto es que nada habla mejor de nosotros, como seres humanos, que nuestra capacidad para disculparnos y corregir nuestros errores. Muchos individuos, por el contrario, dedican tiempo y esfuerzo en elaborar excusas para sus errores, sin reconocer, que nos construimos más como personas sobre las cenizas de nuestros errores, que en la cumbre del triunfo.
Muchas disculpas deben ser simplemente disculpas, no convertirlas en un elaborado manual de razones y causas para excusarnos. Solo la palabra disculpa unida a la genuina promesa de no volver a cometer el error y ser más cuidadoso, es suficiente. No obstante, existen faltas o equivocaciones para las cuales no tiene cabida ninguna justificación, por más elaborada que ésta sea.
Las equivocaciones y errores deben hacernos comprender que somos seres humanos, no máquinas infalibles, y nos brindan la oportunidad para que otros conozcan, con una simple disculpa, nuestro lado humano.
Disculparse por nuestros errores no es rebajarnos, todo lo contrario es engrandecernos, y brindarnos la oportunidad de corregir, cambiar y mejorar.
Miguel A. Terán
¡Feliz Día!
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